El regreso de Shakira a las baladas fue mejor de lo esperado, no solo porque dejó el tema Gerard Piqué de lado, sino por la participación de sus dos hijos, cada uno con un talento particular: Sasha, cantando, y Milan, en el piano.
Tanto ha sido el éxito de Acróstico que solo dos días atrás, sumó 50 millones de stream en Spotify, y este 2 de junio superó los 100 millones de reproducciones en YouTube, algo deseado por cualquier artista, incluso de Shakira, acostumbrada tanto a la fama como a lo bien recibida que es cada canción que lanza.
Valga recordar que para darle un stream a una canción, en este caso Acróstico, Spotify exige que sea escuchada mínimo 30 segundos. Aplica cuando se reinicia la reproducción: es necesario oírla mínimo medio minuto.
En el caso de YouTube, ocurre lo mismo, aunque tiene una regla más: si el mismo usuario repite la canción, no contabilizará más de una visita, debido a la presencia de cookies.
Quien compartió la ‘buena nueva’ fue la propia Shakira, en su cuenta en Instagram, donde suma más de 86 millones de seguidores En sus historias subió un fragmento del video oficial de Acróstico y el número “100M”, haciendo referencia al número de reproducciones en YouTube que alcanzó en apenas dos semanas.
El fragmento que compartió fue justo en el que canta a dúo con el menor de sus hijos, Sasha. “La sonrisa tuya es mi debilidad, quererte”, interpreta Shakira. Luego, su pequeño canta: “Sirve de anestesia al dolor, hace que me sienta mejor, para lo que necesites estoy, viniste a completar lo que soy”.
Acróstico, la cuarta canción desde que Shakira terminó con Piqué, implicó su regreso a las baladas, luego de interpretar un reguetón junto a Ozuna, una ‘tiradera’ contra el futbolista de la mano de Bizarrap y un TQJ bailable con Karol G.
Shakira también dedicó la canción a sus padres
Acróstico, la más reciente canción de Shakira, no solo estuvo dedicada a sus hijos, como se especuló incluso antes de que la lanzara y se convirtiera en tendencia. La letra que enamoró a madres de todo el planeta estuvo dirigida para alguien más y no es precisamente Gerard Piqué.
El sencillo musical también estuvo pensado en sus padres: William Mebarak Chadid y Nidia del Carmen Ripoll Torrado.
