Lana Del Rey se convirtió en una de las figuras más fascinantes y enigmáticas del pop contemporáneo. Desde su salto a la fama mundial con Born to Die en 2012, su obra siempre mezcló elementos con contradicción entre el glamour y tristeza, dulzura y destrucción, deseo y vacío. Hasta el día de hoy, Elizabeth Woolridge Grant (nombre real de Lana Del Rey) publicó nueve discos de estudio y diversas canciones, pero hay una que, según la propia cantante, la define perfectamente.
La pieza en cuestión se trata de ‘Ultraviolence’, el track que le da nombre al tercer LP de Lana, cuya letra dice ‘He hit me and it felt like a kiss’ traducido al español como ‘Me golpeó y se sintió como un beso’, dicha obra nació de una experiencia pasada en la vida de la propia artista con un líder de culto que conoció cuando era miembro de un grupo clandestino en Nueva York.
‘Solía permanecer a una secta clandestina liderada por un gurú. Se rodeaba de chicas jóvenes y tenía un carisma irresistible. Así que entré en esta, digamos, secta, porque anhelaba amor y seguridad. Pero luego descubrí que este gurú no era bueno, sino malo. Pensaba que primero tenía que destruir a la gente antes de poder reconstruirla. Al final, dejé la secta’, mencionó.
Una entrevista dada en el año 2014 con Scott Simon, fue consultada por la frase en cuestión y respondió: ‘Ese ha sido el tema de mi carrera. Lo que pasa conmigo es que, viniendo de la música alternativa y cantando durante nueve años, siendo prácticamente invisible, estoy muy acostumbrada a escribir para mí misma, y al final del día lo hago porque siento que debo hacerlo. Cuando grabo o escribo, no pienso en otras personas. No siempre me resulta cómodo, pero no me callo lo que quiero decir’.