Dwayne Johnson volvió a sacudir al mundo del entretenimiento, pero esta vez lejos del cuadrilátero. A nueve meses de su última aparición en WWE, The Rock vive uno de los momentos más importantes de su carrera, al obtener la nominación que lo coloca oficialmente entre los actores de élite de Hollywood. La Asociación de Prensa Extranjera reveló a los contendientes al Globo de Oro, y la gran sorpresa fue ver al ex campeón de WWE compitiendo por Mejor Actor de Drama gracias a su papel en The Smashing Machine.
En esta cinta, Johnson interpreta a Mark Kerr, una de las figuras más complejas y polémicas en la historia de las MMA, y su actuación ya es considerada la más poderosa y profunda que ha entregado en toda su trayectoria. La nominación no solo reconoce su evolución actoral, sino que también lo pone en la conversación más seria que ha tenido en su vida profesional: ¿puede The Rock ganar un Globo de Oro? ¿Y por qué no, incluso, un Oscar?
La carretera rumbo a los Premios de la Academia está oficialmente abierta para él. Los Globos de Oro suelen marcar la pauta en la temporada de premios, y varios ganadores han terminado levantando la estatuilla dorada. Para Johnson, que hace menos de un año estaba protagonizando Elimination Chamber en WWE, donde incluso encabezó el polémico cambio a rudo de John Cena, este salto refleja el impacto de su disciplina. Su transformación incluyó perder 27 kilos para lograr el físico de Kerr, una muestra del nivel de compromiso que Hollywood ya no puede ignorar.
Hoy, alejado temporalmente del mundo de la Lucha Libre, Dwayne Johnson está enfocado al cien por ciento en la promoción de The Smashing Machine, la película que ha cambiado el rumbo de su carrera. Con críticas favorables y una nominación histórica, The Rock dejó de ser la ex-superestrella que triunfó en la WWE: ahora es un contendiente real en la élite del cine, y podría estar a solo una temporada de convertirse también en ganador del Oscar.