Sergio Ramos por fin rompió el silencio. Después de semanas llenas de rumores sobre su futuro y justo tras la eliminación del Monterrey en las semifinales del Apertura 2025, el histórico defensa español confirmó lo que muchos ya sospechaban: su etapa en el futbol mexicano llegó a su fin. Sin rodeos y visiblemente golpeado por el resultado ante Toluca, Ramos aceptó que el duelo en el Nemesio Diez fue su último partido como jugador de Rayados.
El excapitán del Real Madrid no evadió la pregunta. Al ser cuestionado por TUDN sobre si aún veía su futuro en México, respondió tajante, casi con un suspiro de resignación: “Sí, es mi último partido”. Con ello cerró cualquier posibilidad de renovación, justo cuando su contrato con el club expira en diciembre. Su paso por Monterrey fue breve, apenas dos torneos, pero lo suficiente para dejar huella dentro y fuera de la cancha.
Ramos se despide habiendo disputado 33 partidos, ocho goles y con el gafete de capitán en varios encuentros, además de firmar un registro histórico: convertirse en el jugador más veterano en anotar en una Liguilla, con 39 años y 251 días. Aunque su aventura en México no estuvo acompañada de títulos, sí dejó momentos de liderazgo y una presencia que pesó en el vestidor albiazul desde su llegada.
En su última declaración como jugador de Rayados, el español dejó ver su frustración por la forma en que el equipo quedó fuera: “Siempre duele perder una semifinal… regalamos la primera parte”. Así, entre autocrítica y despedida, Sergio Ramos cierra su ciclo en Monterrey, un capítulo breve pero intenso en su extensa carrera, y ahora el club deberá prepararse para seguir adelante sin uno de los defensas más emblemáticos del futbol mundial.