No tener un testamento puede convertirse en un auténtico dolor de cabeza para las familias. Así lo explicó la abogada Alejandra Pacheco en una reciente entrevista, donde abordó de forma clara y accesible los aspectos clave sobre el tema de las herencias, los tipos de sucesión y la importancia de prevenir conflictos legales.
Según Pacheco, existen tres tipos de sucesión: la legítima, la testamentaria y la mixta. La sucesión legítima ocurre cuando una persona fallece sin dejar testamento, y en este caso será un juez quien decida cómo se reparten los bienes entre los familiares. Este tipo es el más conflictivo, pues suele abrir procesos judiciales largos y desgastantes. “El juicio de intestado puede alargarse por meses o incluso años si hay bienes no declarados o herederos por localizar”, advirtió.
Por otra parte, la sucesión testamentaria, aunque más amigable, también puede presentar complicaciones si no se detalla con precisión qué bien corresponde a cada heredero. En casos donde el testamento no contemple bienes adquiridos después de su redacción, se recurre a la sucesión mixta: parte se reparte por voluntad del testador, y el resto se adjudica por vía legítima.
Un punto importante que mencionó la abogada es que a partir de los 16 años ya se puede hacer un testamento, siempre y cuando se tenga un bien a nombre propio. “La mayoría piensa que es un trámite para personas mayores, pero desde que tienes un terreno, una cuenta bancaria o una propiedad, puedes disponer de ellos legalmente”, dijo.
Además, recordó que las deudas también se heredan, y que hay que distinguir entre un heredero y un legatario. El primero puede heredar tanto bienes como obligaciones, mientras que el segundo solo recibe un bien específico, sin responsabilidades legales adicionales.
Respecto a las condiciones dentro del testamento, Pacheco aclaró que aunque es legal imponer ciertos requisitos, no se pueden establecer condiciones que violen derechos fundamentales. Por ejemplo, no se puede exigir que alguien no se case o se divorcie para recibir una herencia. “El derecho al libre desarrollo de la personalidad está por encima de cualquier voluntad testamentaria”, puntualizó.
Finalmente, hizo un llamado a aprovechar los servicios gratuitos del Archivo Notarial para realizar un testamento ológrafo (escrito a mano), o bien, acudir con un notario público. Recordó que cada septiembre, durante el “Mes del Testamento”, se ofrecen tarifas preferenciales para fomentar esta cultura de prevención legal.
“Cuando no dejamos un testamento claro, lo que heredamos muchas veces no son bienes, sino problemas”, concluyó la abogada.